Sirva este post como homenaje, bien merecido, a ese tipo que
siempre va a correr las carreras populares con una camiseta de Brasil, a veces
con botas de fútbol sala, y que siempre me adelantaba a mitad de carrera…
-
“¡Hijo puta, que me va a ganar otra vez!”
He avanzado bastante en mi nivel de corredor popular, pero
hasta hace bien poco este señor no había desaparecido de mis carreras, ya que
me movía en la mitad del pelotón runner. Ya no me gana, pero sigue presente en
mis pesadillas… Y sé que es cuestión de tiempo, volveré a verle la espalda, tarde o temprano, un domingo cualquiera...
Ni siquiera era el mismo en todas las carreras. Da igual en la
prueba en la que estés, en Sevilla, en un pueblo de la provincia, en Albacete o
en Austria (sí, allí también hay un chaval de 19-23 años que corre con la verdeamarelha. Me ganó en Kufstein, en
los Alpes en la frontera alemana, en un 5km solidario. Ahí nació este post).
Si era un ochomil te pegaba el hachazo allá sobre el
kilómetro cuatro, cuatro y pico. Si era un diez mil bien medido pasaba por tu
derecha sin mirarte sobre el seis, como el que no quiere la cosa… con fasilidad…
Recuerdo agonizar subiendo una cuesta con la vista fija en
un dorsal “10” bajo el nombre de Ronaldinho, o intentar aferrarme a un ritmo
constante detrás de una camiseta Nike que lució Ronaldo en el Mundial de
Francia. Da igual. Él, ellos, siempre estaban allí, para destrozar mi ego
runner por unos minutos. Afortunadamente el mal rato no duraba mucho.
¿Para qué entreno tanto entre semana si luego viene un
chaval que sin entrenar, sin estar mega equipado, sin gps ni tonterías, me
curra siempre? ¿Por qué no tiro todas las camisetas técnicas, medilast,
calzonas paqueteras y me compro la elástica de la Canarinha y todo será más
fácil?
Ni siquiera me veía digno para correr con una camiseta
futbolera de Brasil. Sabía que otro de amarillo me adelantaría… Eso es fatalismo.
Con perspectiva ahora veo que todo ese sacrificio ha dado
resultados. En mis carreras ya por debajo de los 4’ el kilómetro sólo hay
corredores con piernas depiladas, equipados como “Dios manda”, de esos que
hacen series, fartleks, pesas, entrenamientos cruzados incluso...
Pero sé que el corredor anónimo con la camiseta de Brasil
sigue ahí. Dispuesto a adelantarme en el avituallamiento cuando baje la
guardia, a lo Abel Antón con Martín Fiz en el Mundial. Sé que espera a
que me lesione o a que me aburra de correr una temporada para venir a comerme
la moral.
Todos somos Gacelas Thomson en un mundo en el que un León
con camiseta de la selección de Brasil está agazapado para atacar. Es cuestión de
ritmos. Siempre hay un chaval futbolero con mejores condiciones físicas… Pero
de momento no. En un rato me voy a hacer miles recuperando 90”. Ese es el antídoto.
Correr la San Silvestre de Sao Paulo debe ser la muerte a
pellizcos.
AÑADIDO EL 28 DE ABRIL DE 2014.
Este triatleta del#Betis me ganó el domingo en el @icantriathlon 57 :-) #TodoSeaDicho pic.twitter.com/5Pc9ZDoSSu
Siempre me gana corriendo uno con la camiseta Brasil, y ahora en un triatlón uno con la del Betis :-)
Este señor me ganó en el Ican Triathlon Málaga 57 2014 por poco, pero me ganó!!!
Foto © de ellocoquecorre.com
AÑADIDO EL 28 DE ABRIL DE 2014.
Este triatleta del
Siempre me gana corriendo uno con la camiseta Brasil, y ahora en un triatlón uno con la del Betis :-)
Este señor me ganó en el Ican Triathlon Málaga 57 2014 por poco, pero me ganó!!!
Foto © de ellocoquecorre.com
Muy bueno.
ResponderEliminarTe ha ganado uno de segunda categoría Dani...jeje
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